Hoy se suspendió un partido de fútbol entre Estudiantes de Buenos Aires y Almirante Brown por el título de primera "B" (tercera categoría del fútbol argentino). El motivo fué que un artefacto explosivo, arrojado desde la tribuna de Almirante Brown explotó cerca del arquero Cáceres de Estudiantes, provocando la conmoción de este.
Viendo por TV las declaraciones de los protagonistas, me llamó la atención la que realizó un dirigente de Estudiantes. Esta persona dijo que el micro de los jugadores de Estudiantes, en el cual él también se trasladaba, fué atacado por la hinchada de A.Brown y fueron sustraídos del mismo bolsos del plantel. El dirigente dijo (lean bien...) "yo no le echo la culpa a la gente (de A.Brown, se sobreentiende, la que los atacó) sino a la Policía que armó mal el operativo...bla bla bla".
De esta manera, ¿cómo parar la violencia, no? Si no nos atrevemos a condenarla...¿a qué le tiene miedo este dirigente? ¿A decir que la gente hace cosas QUE-NO-DEBE-HACER? ¿o será que él, en el lugar de los hinchas de A.Brown, hubiera hecho lo mismo?
Más allá del comportamiento de hinchas y dirigentes (y a veces también de los protagonistas) la policía NO AYUDA. He visto operativos en las canchas que parecen organizados para que algo pase.
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