Calculo que vieron el comportamiento del equipo Sub-20 chileno, el mismo que venía jugando un excelente fútbol en el mundial de dicha categoría en Canadá pero, en el encuentro semifinal con la Argentina, salió a pegar desde el minuto cero. Así les fué. Perdieron, 2 expulsados (la sacaron barata) y a jugar por el tercer puesto.
Los chilenos creyeron que estaban jugando en un país latinoamericano. Un hincha ingresó y le quiso pegar al árbitro, los jugadores y cuerpo técnico se comportaban de una manera inusual para este tipo de competencias y obviamente con la derrota 0-3 terminaron agrediendo al árbitro y luego insultando a los policías, como lo confesó su técnico el sr Sulantay (verdadero responsable de todo esto como conductor del platel). Eso sí, para todo el periodismo chileno, la culpa la tuvo el árbitro alemán (sí, obvio lo calificaban de nazi...., de mea culpa, ni una palabra...)
Pero señores, eso era Canadá y allí parece que no se jode. Alguno que otro cobró y luego algunos en cana. Nada de policía elemental con perros y gases pegándole al inocente y salvando a los culpables (como los carabineron en Chile donde siempre cobran los visitantes). Todo muy tranquilito y ordenado, pero allí no se jode.
Por suerte, por las selecciones juveniles argentinas pasó José Pekerman y no solo dejó su impronta ganadora: dejó una línea de conducta que ahora sigue Hugo Tocalli, otro señor. Que suerte que tuvimos.
PD:
Mark Pugash, portavoz de la Policía de Toronto, aclaró que "lo que pasó el jueves fue desafortunado, pero si alguien decide actuar agresiva o violentamente, la policía no tiene otra opción que controlar y detener eso. Nos encontramos con situaciones como ésta regularmente en la ciudad y ya sea por un grupo de gente bebida o gente que se comporta mal en un torneo de fútbol, tenemos que actuar. Es nuestro trabajo y es lo que hicimos".
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